El estudio de diseño italiano Joe Velluto crea el Adesign, un manifiesto "antidiseño", que propone la creación objetos disfuncionales e inútiles.
Intenta sentarte en esta silla
Al leer "objetos disfuncionales" a uno le viene inevitablemente a la cabeza los Chindogus, esos inventos japoneses que pretenden ser prácticos, pero cuyo resultado es el contrario: son inútiles, impracticables y muy divertidos. Sin embargo los productos creados por este estudio de diseño sólo comparten con los Chindogus su absurda apariencia.
Los italianos son menos divertidos y no se han creado para hacer reír, sino que son la plasmación material de un manifiesto antidiseño llamado Adesign, cuya consigna podría ser ésta: "si el diseño proyecta la función, Adesign proyecta la disfunción".
Producen objetos de esos que llenan el mundo – relojes, sillas, percheros... - pero los declaran voluntariamente inútiles para plasmar así su visión crítica del diseño. Quieren acabar con la expresión "de diseño" con estos productos informales, radicales, experiementales e inútiles.
La exposición que exhibe estos productos se llama "Useless in More", algo así como "Lo inútil es más" que juega con la expresión en inglés "Less is More" (Menos es Más).
Pero esta idea no es nueva, podría considerarse una vuelta de tuerca de los célebres Objetos Imposibles de Jacques Carelman, ese artista francés que desarrolló una serie de productos fusionando la lógica y el absurdo con gran sutileza.
Solo esperemos que Ikea no coga copie y pegue estos diseños inútiles. Si se lo proponen, pueden llegar a convertir nuestras casas en espacios absurdos e imposibles a buen precio.